Tener la oportunidad, poder estar más allá, tan acostumbrada a no ser, a desconfiar, a no ganar. El mar se te abrió una vez, se te abrió para no parar, y vos no te despertaste, lo arruinaste una vez más. Saber elegir es lo que cuesta más, no cualquiera suma sin restar. Sentis la electricidad, y no la sabes llevar, te quema, te paraliza, y no te deja reaccionar. El enemigo peor, ese gran saboteador, siempre será uno mismo, y ese miedo a estar mejor.
4.3.09
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario