24.4.10

Solo al soñar tenemos libertad,


siempre fue así y siempre asi será.
Creo que a algunos les da miedo... pensar que las cosas pueden ser distintas.
El mundo no es exactamente... una mierda. Alguna gente está acostumbrada a las cosas como están... que aunque estén mal, no pueden cambiar, y digamos que se rinden; y cuando se rinden, todos pierden.

20.4.10

Yo no se por que razón, no te digo nada a vos, yo no se por que razón, si somos lo mismo aunque seamos dos. Se que lloras si llora mi alma, logro reír si escucho tu voz, siempre logras que llegue la calma, amo saber que cuido de vos ♥
Ver, verte, verme ¿podes verme, puedo verte? Estoy acá, estás ahí, si queres podes verme,
solo tenes que querer.
Hay algo capaz de despertarnos del sueño más profundo que es dormir despiertos? Es paradójico, pero creo que no hay mejor despertador que un sueño.
Cuando sos chico tenes algo muy claro, tu juguete preferido es tuyo, si ves que alguien lo quiere sin dudarlo decís “es mío”. Defendes con uñas y dientes lo tuyo, tu juguete, tu lugar, tu novio, pero siempre aparece alguien que viene a disputártelo. Puede ser otra persona o incluso el recuerdo de otra persona, donde había dos ahora hay tres y ya estás en una competencia.
La competencia tiene mala prensa, creemos que ser competitivos es un defecto, nunca una virtud ¿pero no es cuando no tenemos competencia cuando dejamos de crecer?
El problema de la competencia, creo yo, es la falsa creencia de que para que alguien gane otro tiene que perder, para que alguien exista otro tiene que desaparecer.
Olvidarte que nada es tuyo y que todo lo podes perder te puede dormir, se necesita un buen sueño para despertarse. Se necesita un buen competidor para mantenerse despiertos y crecer. No hace falta que otro pierda, la verdadera competencia es cuando todos de alguna manera ganan algo.
No hay garantía de que el sueño vaya a cumplirse, eso te hace esforzarte para ser mejor, para que elegirse sea algo de cada día. De lo que si hay garantía es que si aspiras a ser mejor no hay manera de que no lo seas.

2.4.10


No me dejaste fallarte, ni siquiera me dejaste mostrarte qué tarde se hace sino estás.
No me dejaste perderte, ni siquiera me dejaste olvidarte y morderte el corazón.
No me dejaste volver a donde nunca llegué, de dónde jámas me fui.

No me dejaste salir y eso que nunca yo entré y eso que apenas te ví.